martes, 5 de febrero de 2008

Los avisos de confidencialidad de los email


No son pocas las ocasiones en que recibo un correo electrónico que contiene al final del email un mensaje que contiene frases como :


"La información que contiene este email, incluidos sus archivos adjuntos, es confidencial, y sólo para conocimiento y uso de las personas a las cuales está dirigida. La empresa que remite no se hace responsable de las alteraciones que pudiera sufrir el mensaje una vez enviado.Si por error recibe este correo, le rogamos aceptar nuestras disculpas y, al mismo tiempo, le solicitamos notificarlo a la persona que lo envió, abstenerse de divulgar su contenido y borrarlo de inmediato." El remitente no puede establecer unilateralmente, y sin la conformidad del destinatario, condiciones que obliguen a éste a hacer o dejar de hacer tal cosa. ¿Acaso tiene que haber un equivalente en papel? Estos mensajes le indican al receptor, en tono amenazante, dos exigencias contradictorias. Por un lado dicen que si no eres el destinatario, está prohibido copiar el mensaje, reenviarlo, hacer otras cosas. Y al mismo tiempo, si se quiere avisar al remitente del error y eliminar el mensaje. ¿En qué quedamos? El remitente me dice que no puedo hacer nada con su correo, y al mismo tiempo me ordena que haga algo con él. Plop.

Quien expone de una manera muy cómica esta situación es el abogado Javier Muñoz quien lo presenta en su blog iabogado

3 comentarios:

a las pruebas me remito dijo...

Comparto la idea de que esos avisos son unos auténticos engendros jurídicos.
Pero, claro, entre tanto sean los departamentos de comunicación de las empresas quienes los redacten, sin ni tan siquiera recibir el mas elemental consejo de la asesoría jurídica, mal vamos.
De otra parte, considerese que esos departamentos tan "marketinianos" ven estos chorriavisos, como algo que viste mucho y queda muy bien. No los lee casi nadie, pero llenan mucho espacio y molan al personal.
Y para que el desmadre crezca, muchas empresas establecen concienzudas políticas de seguridad en las comunicaciones electrónicas y en los accesos a la red, pero al final, cualquier usuario, sin ningún control, se autofabrica su firma automática y la adorna con estos textos tan "serios" que ellos mismos paren.....

Andres Pumarino Mendoza dijo...

Totalmente de acuerdo, de hecho a veces son los departamentos de informática que redactan esos textos con escaso conocimiento de la materia.
Gracias por tus comentarios.

Rodrigo Gutiérrez Burgos dijo...

No sirven necesariamente como herramienta legal, pero si son útiles, ya que permite amedrentar a aquellos que no tienen conocimiento de su invalidez legal y -cuando bien redactados- solicitar amablemente al receptor equivoco de un correo electrónico que por favor te comunique de la equivocación –permitiéndote enviar el correo a la persona correcta- y solicitarle amablemente que lo destruya. De no estar el mensaje probablemente el receptor equivoco ni siquiera se molestaría en comunicarte de tu equivocación.